Hay joyas que simplemente lucen bien… y otras que saben dónde poner el foco.
Esta manilla no grita, pero sí deja claro quién eres.
El rojo resalta con intención. Y en el centro, el detalle que cambia todo.
Un balín grabado en oro laminado 18K que eleva la pieza y le da carácter propio.
Porque cuando todo se ve igual, lo que importa es lo que está en el centro.
Ideal para quienes eligen desde la autenticidad, no desde la costumbre.
Y para quienes entienden que el verdadero estilo está en los pequeños acentos que dicen mucho.
👉 Agrégala al carrito y haz que tu joya hable por ti.
Hay piezas que se olvidan. Esta no.
Beneficios